«Se nos antoja complicado que el surfing se eleve a la categoría de deporte nacional…»
Tranquilo, no te has equivocado; esto no es La Razón ni el ABC. Más que «Viva España» quizás deberíamos haber titulado esta columna como «España está viva», pero el juego de palabras era demasiado tentador para dejarlo pasar.
El caso es que todo esto viene a cuento porque la selección española de surf ha vuelto con una medalla de oro por equipos en los mundiales que acaban de disputarse en Japón, y eso es sin duda un síntoma de vitalidad en nuestro surfing. A veces lo dábamos por muerto, pero España venció a potencias como Portugal o USA, lo cual es cuanto menos muy meritorio y esperanzador.
Por una parte son muchos los que ni siquiera se les pasa por la cabeza que el surf sea un deporte como los demás, y por otra ya se sabe que en esta país en muchos lugares el patriotismo no se lleva de la misma manera…un binomio que muchas veces va de la mano. Por tanto se nos antoja complicado que el surfing se eleve a la categoría de deporte nacional y que quedemos en bares con cerveza y torreznos para ver a «la roja» defender su título; pero no cabe duda que para aquellos patriotas que ven el surfing como un deporte aspiracional, esta es sin duda la mejor de las noticias.
Andy Criere, Garazi Sánchez, Gony Zubizarreta, Nadia Erostarbe, Leti Canales y Vicente Romero con Pablo Solar al mando, vencieron casi en el último segundo una final que por lo que cuentan las crónicas debió ser realmente emocionante. El caso es que una amalgama de catalanes, gallegos y vascos han conseguido una hazaña que es digna de reconocimiento. No se trata de cuestionar su patriotismo; puede que algunos duerman con la rojigualda en la cama y otros se limpien su culo con ella. El hecho es que se fueron a Japón a defender sus colores y han vuelto con una medalla de oro, lo que por encima de muy españoles, les hace muy profesionales.