Hace apenas unas horas que el Lexus Pipe Pro, primer evento CT de la temporada, finalizaba con las victorias del local Barron Mamiya y la jovencísima Catty Simmers.
Naturalmente, este es el gran titular. No obstante esta edición del Pipe Pro, prolífica en tubos y polémicas, ha dado para muchísimo más.
Si bien la organización ha recibido alguna crítica por saltarse ciertos ‘calls’ en determinados días particularmente sólidos, la verdad es que -en líneas generales- el evento se ha desarrollado en condiciones realmente buenas, en medio de un swell algo esquivo que, pese a hacerse de rogar, sí ha brindado lo que todos esperamos de cualquier Pipe Pro que se precie: tubazos.
Los chicos…
En cuanto a los chicos, la gran polémica ha sido suscitada por la archi conocida actuación de Toledo, que si bien le ha distanciado de muchos fans como un claro fiasco en su faceta de ‘tube rider’, le sitúa además en una situación de cierta presión ante su papel en las olimpiadas (que se disputarán en Teahupoo, otro mega ‘slab’ de izquierdas) así como en un principio de temporada ciertamente cuestionable.
Todo lo contrario ha sido el papel desempeñado el vencedor, Barron Mamiya, que se sitúa en el olimpo hawaiano como un más-que-digno sucesor de grandes nombres vinculados históricamente a Pipe como Andy, Jamie O, Bruce o el propio JJF, el otro finalista que también ha brillado particularmente durante todo el evento. Y es que Mamiya, pese a su juventud, se ha mostrado intratable en cada una de sus mangas, acumulando puntuaciones sobresalientes y resultados casi perfectos en las condiciones más exijentes, tanto en ‘frontside’ como en ‘backside’.
Cabe destacar también el papel de ‘underdogs’ como Ian Gentil, que fue capaz de colarse en semis, alcanzando un puesto #3 en el ranking general. Así como Connor O’Leary, quien año tras año lleva dejando su impronta de forma más sólida en la ola reina hawaiana.
Buenas bombas y mucha garra han demostrado también nombres como Callum Robson, Jake Marschall o Liam O’Brien. O viejos conocidos como Yago Dora, Italo, Jordy o el propio Media, que si bien no han sido capaces de avanzar hasta las finales, sí han denotado muchas ganas y esa sed de triunfo que les viene caracterizando hasta las últimas consecuencias.
Muy bien también Ewing, uno de esos ‘Tops’ que sin llegar a ser claro favorito en Pipe, sí que va mostrando cada vez más aplomo y estrategia en mangas marcadas por ‘barrels asesinos’.
La otra cara de la moneda les ha tocado a Rio Waida, eliminado a las primeras de cambio tras una actuación bastante discreta. Lo mismo que Ibelli, quien no ha podido repetir su brillante participación del año anterior. O Kelly, eliminado contra todo pronóstico en Ronda 32 por el propio Ewing.
En cuanto a los rookies… Más ganas que eficacia. Pues si bien les hemos visto motivados y tirándose a buenas bombas, la falta de experiencia en Pipe ha pasado factura a gente como Cole Housmand o Kade Matson. Mejor suerte han corrido, eso sí, Crosby Colapinto y Ramzi, dos de los que ansiábamos por ver y que no han defraudado. Así como Jacob Wilcox, que ha ido incluso más sobrao.
Las chicas…
Sin lugar a dudas esta ha sido la edición del Pipe Pro en que hemos visto a las chicas más seguras y más’kamikaze’ que nunca. ¡Madre mía que tubazos se han hecho! Sobre todo las dos finalistas, Molly picklum y Catty Simmers.
Mientras que la final de los chicos fue determinada por Pipe, en el caso de las chicas Backdoor fue la decisiva. Sobre todo en el caso de Simmers, quien ha dejado para el recuerdo barrels sobresalientes en ‘la puerta de atrás’.
¡Menudo porvenir el de Catty! Que además de estilazo y repertorio, ha demostrado al mundo que no se corta ante un muro ‘doble overhead’.
En el caso de Picklum… ¡¿Qué decir?! Ha ido sobrada tanto de izquierdas como de derechas, cosechando el primer 10 de la temporada gracias a un olón clásico que combinó un drop técnico, un sifonazo y toda la belleza de un Pipeline de libro.
Otra gran destacada ha sido la local Bettylou S. Johnson, que no llegó a la final de milagro, colándose en semis, donde hizo otro papel excelente con una nota total de 15.33 a base de un aplomo y una técnica absolutamente perfectos, tanto en Backdoor como en Pipe.
Buen papel también, a pesar de no haber brillado especialmente en la última jornada, la de las veteranas del Tour comoTatti Webb, Luana Silva, Johanne Defay o la actual campeona Caroline Marks, todas ellas copando el Top 5 general.
El fiasco ha sido en este caso para Carissa y Lakey Paterson, dos claras favoritas que, curiosamente, han perdido a las primeras de cambio en una ola que debería haber premiado su sobrada experiencia. Pero ya se sabe… El mar es un terreno de juego sobre el que no hay nada escrito y las nuevas generaciones vienen pisando mmmmmuy fuerte.
En fin, si bien Pipe ha dejado imágenes brutales en nuestra retina, así como un buen río de tinta nutrido de polémicas, sorpresas y fiascos, el ambiente seguirá bien caldeado durante todos estos días ya que el periodo de espera para el Sunset Pro comienza mañana mismo y los pronósticos no pintan nada mal, así que… ¡Hasta muy pronto!