En lo relativo al surf, las olimpiadas de Paris 2024 (disputadas en la imponente ola tahitiana de Teahupoo) concluyeron ayer, última jornada del ‘waiting period’.
Pese a que la competición ha carecido de cierta constancia dado que el ‘swell’se ha visto afectado por periodos tormentosos y condiciones demasiado ‘ventadas’, sí que hemos podido disfrutar de jornadas verdaderamente épicas que han dejado tras de sí momentos estelares.
Naturalmente, lo más destacado es el oro del local Kauli Vaast (competidor por Francia) y la americana Caroline Marks, que sin duda está viviendo uno de los momentos álgidos de su carrera. Y es que además de este preciado oro, Caroline es la vigente campeona mundial (2023) y, a falta de un evento, se halla en segunda posición en el ranking general ante la inmiente ‘gran final’ de Trestles. Casi nada…
Por su parte, Kauli ha conseguido el mayor logro de su carrera con esta medalla, pues si bien es indiscutiblemente uno de los mejores ‘tube riders’ del planeta, su participación en el circuito WSL no ha resultado -hasta ahora- todo lo fructífera que se espera de él (actualmente ocupa el puesto nº 46). Confiamos que esta portentosa victoria frente a expertos rivales de la talla de Medina, Jack Robo, John John o Joao Chianca, entre otros, sirva para inyectarle una dosis extra de confianza y motivación con el fin de verle donde se merece.
El podio ha quedado conformado de la siguiente manera:
Surf masculino
1. Kauli Vaast (Fr) – ORO
2. Jack Robinson (Aus) – PLATA
3. Gabriel Medina (Bra) – BRONCE
Surf femenino
1. Caroline Marks (USA) – ORO
2. Tatiana Weston-Webb (Bra) – PLATA
3. Johanne Defay (Fr) – BRONCE
Sin embargo, además de gloria y metales preciosos, las olimpiadas ha dado mucho, muchísimo, más de sí. Así que vamos con un (no tan)pequeño resumen olímpico.
¡Tomaoslo con calma, que este artículo es un auténtico maratón!
SENTENCIA PARA EL JUEZ
Una de las grandes polémicas que el surf olímpico ha traido consigo fue la destitución del juez australiano Ben Lowe.
El motivo que propició su cesión por parte del comité fue que Lowe compartió en sus Redes Sociales una foto posando con Ethan Ewing y su entrenador Bede Durbidge, ambos compatriotas suyos.
Alegando que los jueces han de hacer gala de la mayor imparcialidad posible y que tal acto denotaba una clara preferencia, los encargados de la competición decidieron prescindir de Lowe para el resto delevento.
El escándalo inicial propició que se llegase a poner en tela de juicio la claridad de las puntuaciones emitidas por parte del australiano. Este hecho dio lugar a que se hiciesen públicas las notas conferidas por él durante su participación, revelando un criterio absolutamente correcto, dentro de la media y ceñido a los parámetros generales en todo momento. Con lo cual, la transparencia y claridad con que se ha juzgado no ha sido motivo de discusión y la ‘anécdota’ se reduce al ‘poco tacto’ a la hora de gestionar una imagen en un contexto determinado.
EL LÍO DE LAS PINTADITAS…
Otra de las grandes controversias han sido causadas por el arte. Y es que en este caso las pintadas de las tablas de Jack Robinson y Joao Chianca han traido cola.
En el caso de Jack, la polémica se desató cuando representantes de Corea del Sur denunciaron el simbolismo q denotaban sus tablas, decoradas con un guiño explícito a la bandera del ‘sol naciente’, de Japón, en franco homenaje a Andy Irons (esta era una de sus pintadas icónicas en tablas y bañadores).
Pese a que el equipo de Arakawa (shaper de Jack y de Andy) decidió suprimir de las pintadas el elemento ‘sol’, sospechando las posibles repercusiones que podría traer consigo reproducir el diseño original ‘tal cual’, la clara alusión al ‘sol naciente’ no ha gustado a los coreanos dado que dicha bandera fue la empleada por el Japón imperial en su invasión militar, así como en determinadas atrocidades correspondientes su implicación en la Segunda Guerra Mundial.
Lejos de sancionar a Robinson, éste sólo tuvo que ocultar los rayos de su sol para proseguir la competición. Algo que no le impidió brillar, ya que se llevó a casa una medalla de plata bien reluciente.
Por su parte, Joao Chianca también tuvo que tirar de ‘Photoshop’ improvisado a la hora de suprimir el Cristo Redentor (icono de Rio) que formaba parte de su bandera brasileña, elemento visual en torno al cual giraba todo su quiver.
En este caso, el comité olímpico declaró que Cristo es una figura claramente religiosa y las olimpiadas tratan de ser lo más neutras posibles en este aspecto, evitando a toda costa alusiones directas a religiones o simbolismos que denoten confrontaciones historicas entre naciones.
Más de lo mismo. Chianca adaptó sus tablas y eso no pareció hacer decaer un excelente ‘performance’ que lo llevó hasta ‘cuartos’, donde perdió frente a Medina.
Jordy también tuvo que hacer un apaño. Pero en este caso nada que ver con implicaciones nacionalistas o religiosas sino con algo más tangible y lucrativo. Y es que el corporativismo del sudafricano le indujo a dejar entrever un ‘sticker’de O’Neill en su quiver, algo con lo que el comité olímpico es totalmente tajante (impide que se vean pegatinas de ‘sponsors’, a excepción del fabricante), de ahí que Jordy acabase tapando con cinta americana la pegatina de la marca americana.
¿Acaso creíais que Medina o Toledo se habían vuelto discípulos del minimaslismo pegatinero de Alex Knost? ¡Nada de eso! Como veis, fue el C.O.I quien prohibió tajantemente tablas de surf al más puro estilo Moto GP.
LA ROJA (¡DEL SURF!)
Mención especial merecen nuestros representantes Andy, Janire y Nadia, que no sólo han hecho historia al ser los primeros surfistas españoles en participar en unas olimpiadas, sino que han desempeñado un papel más que digno frente a nombres de primer orden en una ola tan temible y complicada como Teahupoo.
Andy tuvo la ‘mala suerte’ de enfrentarse a John John en primera manga, algo que dificultó en parte su evolución en la competición dada la archiconocida familiaridad con la que JJF se desenvuelve en Teahupoo (y básicamente en cualquier ‘slab’ tubero).
En cuanto a Janire, no pudo superar su ronda de repesca contra la israelí Anat Lelior, algó que dejó con cierto sabor agridulce a la guipuzkoana, quien poseía verdaderas ansias de seguir avanzando en la competición frente a una rival más ‘asequible’.
Pese a todo, dada la juventud de Janire y la enorme progresión que está mostrando en su surf, no tenemos duda de que le queda cuerda para rato y ahora toca enfocarse en el QS y los ISA de cara a las próximas olimpiadas, donde esperamos verla de nuevo, de todo corazón.
Finalmente, Nadia sí logró sellar una actuación sobresaliente llegando a colarse en cuartos de final, donde perdio, nada más y nada menos, que con la subcampeona Tatiana Weston-Webb.
Este éxito, unido al increíble 6º puesto que ocupa actualmente en el ‘ranking’ general de los Challenger Series, hace que Nadia esté viviendo el momento más dulce de su carrera. Por ello, desde aquí, queremos darle la enhorabuena y enviarle todo nuestro apoyo de cara a su próxima participación en el US Open (6 – 11 agosto).
BYE BYE CARISSA
Algo tristes nos ha dejado Carissa en lo que parece ser su adiós indefinido ante la competición.
Si bien es cierto que afirma necesitar un largo descanso, pero que no descarta participar en eventos especiales, algo que no cierra por completo las puertas, el rigor físico y mental que impone el Tour en estos días sólo ‘premia’ a quienes están ‘onfire’, mientras que ‘castiga’ a quienes son incapaces de continuar en modo ‘psycho’, algo que ha hecho mella en la campeona hawaiana, afectada en parte por el nuevo formato con final en Trestles (en 2025 el escenario final será Fiji).
Sea como sea, Carissa no sólo ha marcado una era, sino que ha abierto camino al ‘power surf’ femenino elevándolo a su máximo exponente. Por ello, lejos de verla como un tesoro de nuestro pasado, confiamos en que dicho descanso propicie una vuelta con más fuerza o, en todo caso, que entre medias nos mantenga al día de su portentoso surfing.
SHANE DORIAN = GLADIATOR
Al margen de la competición, otro momento álgido que nos han dejado estos días es el tremendo olón que se cogió Shane Dorian, quien hizo gala de la más extraordinaria técnica en uno de los ‘drops’ del año y seguramente de su vida.
Es cierto que esto no tiene nada que ver con las olimpiadas en sí. Pero teniendo en cuenta que Shane ha sido preparador del Team USA (Carissa, Caroline, JJF y Griffin) que este hecho ha tenido lugar en el transcurso de un ‘swell’ renciente, con toda la flor y nata olímpica en el ‘spot’, y que siempre es un puntazo ver a todo un titán de 52 años continuar batiendo récords y derribando límites, confiamos que no haya protestas por vuestra parte ante un último epígrafe que queremos emplear a modo de laurel que corone esta maratoniana crónica.