Mi actitud un tanto sumisa me ha costado comerme las mayores series en Jaws
Bueno Axi, cuéntanos un poco como fue esa llamada que te llevó hacia Jaws
Jaws está representado la revolución del mundo del surf de olas grandes a remo. Desde hace mucho lo tenia en el punto de mira, más o menos desde que cogí la ola de Belharra remando. En aquellos tiempos me surgió la idea de intentar Jaws y Belharra a remos, pero por tema financiación y por accesibilidad, me centré primero en Belharra. Aquel mismo invierno en el que di caza a esta ola, en Jaws los brasileños empezaron a surfear la izquierda por primera vez, así que el objetivo para mi ya había perdido parte de su atractivo.
En cambio estos últimos años ya se surfea con más regularidad y con unos calibres muy considerables. Este año, en el campeonato y en el posterior swell, que fue más grande aún. Entonces vimos que el tema se estaba revolucionando de nuevo, y que se estaban volviendo a empujar los límites, así que sentí la llamada y que mi lugar estaba allí y que tenía que ir; ponerme a prueba, disfrutarla, surfearla y hacerme un hueco entre los grandes allí mismo.
Sin pensarlo mucho, y viendo que la marejada que venía era mayor aún que la anterior, en la que se decía se había surfeado la mayor ola surfeada jamás a nado. De hecho quería hacer un doblete. Primero ir a Nazaré, volar desde Lisboa y pegar un campanazo gordo. Hablé con Jerome, que llevaba dos meses sin parar de surfear, y el médico le había dicho que parara, que sino le iba a dar algo. Así que me pidió que no le arrastrara a Nazare, y sin pensarlo mucho nos fuimos a Hawaii directos.
¿Cuáles son tus olas soñadas para el tema de olas grandes?
Jaws era uno de los sueños que llevaba ansiando, y he tenido la suerte de hacer doblete con Todos Santos, con lo cual he matado dos pájaros de un tiro. Pero todavía me quedan olas que quiero visitar, como Dungeons en Sudáfrica y Mavericks en California. Este último se me ha enfriado un poco más porque San Francisco está ahí al lado y no me gusta pelear con tanta gente, me gusta que las cosas fluya, disfrutar y compartir unos olones con amigos, que es lo que siempre he hecho.
En Jaws me ha llamado la atención que es justo lo contrario. Hay que pelar mucho las cosas, guardar prioridades… y esa actitud un tanto sumisa me ha costado comerme las mayores series en Jaws.
Dicen que el tema de las olas grandes se vive de una manera muy especial en Hawaii
Quizás hace años sí que podía ser algo diferente, el surf está muy arraigado en la cultura hawaiana y la gente suele estar muy expectante a los mares grandes. Pero creo que aqui ha habido tal expansión que el surf también se vive de una manera especial.
Allí la cobertura de medios, de logística y seguridad sí que se vive de otra forma. Por otra parte son aguas cálidas, y cuando una ola gigante te echa hacia abajo, me he sentido mucho más cómodo, y hasta juraría que flotas más. Me decía a mi mismo «quiero agua caliente en casa» aunque eso también supondría mayores problemas de masificación.
Yo creo que van a empezar a pasar cosas gordas
A cada nuevo swell, alguien hace una jartada mayor…nos cuesta imaginar lo que se siente ahi dentro. ¿No te asusta meterte en ese tipo de condiciones?
Hemos estado hablando allí con al gente que coordina el tema de los rescates en Jaws y ellos me decían, «Axi, la gente no sabe lo que hace». Muchos ven allí la oportunidad allí del salto a la fama, y nuestra actitud en ese aspecto ha sido la opuesta; una actitud humilde, sumisa, sin pelear prioridades.
Comentaba DK Walsh y todo su equipo, que la gente, por el hecho de haber jetskis en el canal, se echaba a cualquier ola sin previo acuerdo, sin hablar las cosas en definitiva. Ellos me decían que no tenían ninguna obligación de asumir esos riesgos…¿y si luego pasaba algo?, ¿cuál sería la moneda de cambio? «La gente no va a responder» decían. La gente era muy insensata en ese aspecto.
El día 27 cuando entró el swell, yo me estuve reservando para última hora porque es cuando más gigante se iba a poner. Me arrepiento de haber tomado esa decisión cuando Jamie O´Brien ya se había cogido la mayor ola de su vida y a posteriori empezó a saltar el viento. Las condiciones se pusieron muy rudas e incluso grandes nombres, que no diré por respeto, y a los que aplaudo su decisión de ser cuerdo y sensato y reservarse para el día siguiente.
El 90% fueron wipeouts, se están empujando los límites hasta unos puntos preocupantes, porque era un megaswell. Cuando estaba terminando el día yo estaba en plan cabezón queriendo coger una ola, pero los locales me decían, «Axi no es el día, es mejor reservarnos para el día siguiente.» Por mucho que se están superando los límites, vi el aspecto humano de muchos riders cos sus sabias decisiones de saber parar, y eso es algo que aplaudo.
Otra cosa que me impactó es que cuando venía una serie gigante y uno empezaba a remar hacia arriba y a abrirse, el resto le seguían como borregos, incluso los nombres más grandes. Yo estaba convencido de que las referencias que había tomado me servían y sentía que estaba en zona segura, pero ves remar a los que son tus referencias en el mundillo y al final te dejas llevar y también te abres por si acaso.
Yo creo que van a empezar a pasar cosas gordas y vi a gente que sacaban prácticamente inconsciente, vi rostros sangrando, tablas destrozadas…se hablaba de más de 20.000$ en tablas rotas en una jornada. Una barbaridad. Se está llegando a un punto en el que creo que la gente se debería replantear dos veces si se quiere seguir por ese sendero, y si se quiere, por lo menos no sin contratar servicios de rescate, sin tener logística de rescate, no de cualquier forma desde luego.