Por eso, en pos de la paz, os vamos a dar una serie de ‘tips’ (también de cajón) con los que, en lugar de incrementar vuestra lista de adversarios, tal vez aumentéis la dosis de buen karma y el número de olas en vuestro haber.

… Sobre todo ahora, que se acerca el buen tiempo y, con él, aumentan las multitudes

5. EVITA IR EN PROCESIÓN

Sabemos que mola mucho ir a surfear con un puñao de amigos. Pero también sabemos que no resulta gratificante ver entrar a siete personas a la vez en un pico. Esto es así, sea donde sea.

Por eso te recomendamos ir a surfear solo o con un amigo. De esta forma, tal vez disminuya el número de anécdotas o batallitas en el agua, pero seguro que te ganarás la simpatía de los locales. Y, créenos, a la larga saldrás ganando.

…Al fin y al cabo, ya tienes el bar para contar batallitas (eso sí, ¡con mascarilla y distancia social! ;P)

4. ¡ESE MÓVIL!

Está claro que con el Whatssap las cosas han cambiado y ahora podemos informar acerca de las condiciones, a tiempo real, a todo un grupo de amigos.

Eso no quita para que tengas dos dedos de frente y te pongas a hacer fotos como un loco según bajas del coche, a vista de todos, como si hubieses mutado en el corresponsal de un telediario.

Ok, sé un buen amigo y avisa. Pero, del mismo modo, sé cauto y no conviertas tu baño en  un informativo multitudinario. Hazlo por ti y por el resto, ¿o prefieres encontrarte a 50 personas en lugar de 15 en el pico?

3. BAJA LA VOZ

Una de las cosas que peor quedan en un pico (sobre todo cuando no somos habituales), es que nos pongamos a dar voces repartiendo olas cuando se aproximan a nuestro grupo de amigos. Del mismo modo, también queda como el culo eso de celebrar una ola o ponerse a vociferar cuando se aproxima una serie que apenas llega por la cabeza.

Ok, entendemos tu entusiasmo. ¡El surf se trata de ello! Pero contén ese énfasis que a veces puede resultar molesto -e incluso cómico- para todos aquellos que llevan entrando años y años en ese mismo spot que tú acabas de descrubir.

Sí, el surf consiste en descubrir y experimenta nuevas sensaciones. Pero también de tener en cuenta a los que ya estaban antes que tú.

2. NO ‘BUITREES’

Por mucha energía que tengas y muchas ganas de coger todas las olas. Por mucho que quieras entrenar de cara al próximo ‘contest’, o simplemente te hayas venido arriba con el último vídeo de John John, por favor, no te pases todo el baño remando de acá para allá alrededor de la gente, situándote constantemente a su lado, ganando prioridad o incluso luchando una posición privilegiada según remotas tras haber cogido una ola.

Una actitud así no sólo denota una gran forma física sino una total falta de respeto.

1. NO SALTES OLAS

Lo sentimos, pero llega un punto en que ya no vale eso de ‘no te vi’ o ‘pensé que no llegabas’. Sencillamente, mira antes de remar y sé consciente de que, del mismo modo que a ti no te gusta que te salten, no lo hagas tú.

En el agua hay (o debería haber) prioridades, reglas y un supuesto pacto tácito de caballerosidad. Es decir, para que el tráfico sea fluido, debería ser aplicado un código de circulación donde reine el respeto, la experiencia, la asiduidad y, por encima de todo, la educación y el sentido común.

De esta forma, aunque cada vez seamos más, seguirá habiendo olas para todos (o así lo deseamos).