El día anterior a la celebración del campeonato del Arnette Punta Galea, el mar se puso gigante por la tarde. Indar Unanue fue a echar un vistazo a Meñakoz, y para su suerte por allí apareció Jaime Fernández. De lo contrario Indar hubiera optado por no meterse; pero la seguridad que da entrar con alguien, y más con la experiencia de Jaime, hizo que ambos se motivaran y se dieran un baño de "calentamiento" para el evento del día siguiente.
Un comentario
que grande jaime tuve el honor de conocerle cuando hizo arquitectura en donostia tienens que contar la de sunny garcia con iñigo letamendia que llegaron ameñakoz y tu salias del agua y volvisteis a entrar con seis metros plus y el sunny se llevo una buena correccion saludos tio grande