Precedentes / 2014
Hace unos años ya habíamos hecho un diseño similar basado en una foto que cubría toda la tabla. El problema de entonces fue que las tablas apenas duraron 3 o 4 baños antes de partir debido al material usado: tela de poliéster impresa con tinta de látex.
Lo bueno de este material es la increíble calidad fotográfica que ofrece. Lo malo… Que al tratarse de una tela tan densa, ésta no permite que la resina empape bien, acortando muchísimo la vida de la tabla puesto que la tela no llega a pegar bien con el foam y se deslamina muy rápido.
Impresión actual / 2017
Precisamente, debido a la corta duración de las tablas anteriores, decidimos volver a intentarlo con otro tipo de tela.
De entre todas las pruebas, acabamos quedándonos con el papel de seda, que si bien no proporciona una calidad fotográfica tan buena, sí que absorve por completo la resina favoreciendo que ésta cale en el foam. El resultado es una tabla mucho más ligera y duradera. De hecho, no se aprecia ninguna diferencia con respecto a una tabla normal.
A tener en cuenta
El papel seda es tan fino (viene a ser como un papel de liar) que hay que extremar las precauciones a la hora manipularlo.
Para empezar, conviene plancharlo antes de ser usado. Con ello evitaremos dobleces y pliegues en la impresión debido a su empaquetado (suele venderse en retales de metro plegados).
A la hora de imprimir, hay que tener en cuenta que un exceso de tinta hace que se rompa. Por eso los chicos de la imprenta limitaron el chorro de tinta y colocaron un papel más absorvente debajo (pegado con celo). Dicho papel actuó de base y, además de impedir que la máquina se ensuciase con la tinta que el papel seda era incapaz de retener, evitaba que éste se rompiese debido al calor del rodillo y la manipulación.
Una vez impreso y seco, conviene guardarlo en una carpeta dura para evitar que se doble o se rompa y también es importante separar las láminas para que las tintas no se mezclen y se ensucien.
Glaseado
El papel va dispuesto directamente sobre el foam, bajo la tela de fibra. Para lograr que el papel asiente bien, recomendamos depositar una pequeña cantidad de resina extendida a brocha.
Ensayad antes de aplicar la resina y tened clara la disposición del diseño, pues una vez que ambos entran en contacto no se pueden separar sin romperse.
Diseño
Como decíamos, somos conscientes de que esto ya está inventado y no es nada nuevo. Además, dada la porosidad del papel seda (absorve bastante tinta haciendo que ésta se expanda), nos resultó imposible jugar con otro tipo de texturas y tapices más detallados.
Pese a estas limitaciones, sí quisimos dotar las tablas con un cierto toque temático, de ahí el tema oscuro del vampirismo y los cementerios.
Por último, y para darle un toque nuevo, jugamos con la disposición alineada de dos fotos diferentes en cada tabla para que éstas interactuasen a modo de colagge (una en color y otra en blanco y negro).
El vampiro es Nosferatu, de la icónica peli de 1922. La foto está tomada a la misma pantalla de la tele, de ahí esa textura sucia llena de pixel e interferencia. La imagen que le acompaña es una muestra de sangre.
Las chicas forman parte de una portada de un disco de Black Metal clásico. Como parece que ambas están pasándoselo pipa entre sangre, por eso hay un ángel ahí abajo expulsándolas del cielo.
Y por último, esos tipos tan feos son ex miembros de la mítica banda MAYHEM. Ambos están muertos, de ahí que haya una silueta con una cruz apuntando a cada uno.
IMPRESIÓN: Fotomecánica Principado
DISEÑO: Legi
FOTO: @road.666, @elmohernandez, @northmorla
GRACIAS: Margruesa, Gilito (Wat Say), Jorge (imprenta), Edu (Monster)