La web de surf

[seq_viewer width=»630″ postid=»1030″ show_count=»1″]

Fotografía por Sergio Villalba / WE agency

DATOS TÉCNICOS
Modelo de la cámara : Canon EOS 1D Mark III
Fecha y hora : 02/10/2011 19:53
Distancia Focal : 50mm
Tiempo de exposición : 1/500
Apertura : f/1.8
ISO equiv. : 500
Exposición : Manual

¿CÓMO SE HIZO?
Esta secuencia, de hace casi dos años, sigue teniendo un recuerdo bastante agridulce para mi. Sigue siendo una de mis secuencias acuáticas favoritas, y teniendo en cuenta las dificultades de la situación (que explicaré luego) me hace sentir especialmente contento, si bien no puedo dejar de pensar en cómo hubiera resultado en otro momento del día.

¿De qué dificultades hablo? Para empezar, no nombro el spot porque, si bien no es tan secret como quisiéramos, es una ola que rompe muy poco y no quiero desvelarla. Sí puedo asegurar que el lugar se satura mucho de bugueros. Imagina un pico reducido, en el que 5 personas serían multitud, pero con 25 más. Imagina también que todos son, más o menos, del lugar menos tú. Borja logró hacer algunos amigos durante su estancia, pero seamos realistas, el porcentaje de olas por cabeza era bastante bajo y no paraba de ver como pasaban bombas por delante de sus narices sin poder remarlas.

Se hacía tarde, el sol ya había tocado el horizonte y yo andaba bastante mordido porque a pesar de las olas que habían, seguía sin un fotón. Entró esta serie y un amigo mio tuvo un gesto que siempre le agradeceré diciéndole a Borja «¡venga, dale tú!». Borja no se lo pensó, remó lo justo para bajarla y meterse al boquete. Fue todo tan rápido que apenas tuve tiempo de encuadrar, enfocar y disparar.

En ese momento surgieron las siguientes dificultades. Como decía, el sol ya se había puesto y la luz era bastante escasa. Me vi obligado a bajar la velocidad hasta 1/500 lo que debería ser suficiente pero no es lo ideal para obtener una imagen totalmente nítida a una distancia tan corta. La 1D markIII que tenía en esa época rendía bien en condiciones de poca luz, pero ni de lejos se asemejaba a las cámaras que la sucedieron, así que rara vez pasaba de ISO 640 en el agua. En ese momento tenía puesto ISO 500 y el diafragma de mi objetivo 50mm a 1.8, casi todo lo abierto que puede estar, lo que hace que las imágenes carezcan de profundidad de campo y queden bastante suavizadas. Está claro que las condiciones de luz no eran las óptimas, de ahí que la secuencia tenga ese aspecto suavizado que tanto odio y haya tenido que pasar por una buena sesión de photoshop para poder usarse.

Una de las fotos de la secuencia fue publicada en la revista 3sesenta, pero no puedo negar que me costó bastante colocarla a pesar de ser una de mis fotos favoritas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *