Mick Fanning se retira, y todos le recordaremos por su surfing rápido, preciso y afilado. Pero el australiano se eleva a la categoría de leyenda no sólo por sus méritos deportivos, también por su calidad humana y su fuerza para sobreponerse a las muchas adversidades que han marcado su carrera.
No vamos a descubrir nada cuando decimos que Mick Fanning es uno de los que pasarán a la historia de nuestro deporte:
3 veces campeón del mundo y probablemente el surfista más rápido del Tour.
Pero más allá de sus méritos deportivos, Fanning es una persona que debería ser recordada por ese ser humano capaz de sobreponerse a las circunstancias más duras que una persona puede afrontar en la vida.
Mick y su familia se mudaron desde Coffs Harbour a la zona de la Gold Coast en Australia, donde creció surfeando con su hermano Sean, que por desgracia moriría en un trágico accidente de tráfico. Este hecho marcó a Mick para siempre, y el surf pasó a ser el refugio donde aferrarse a la vida. En la Gold Coast surfeaba con amigos como Parko y Dingo; juntos formarían ese grupo que la prensa denominó como «Cooly Kids».
Pese a las trágicas circunstancias que le acompañaban, Mick se sobreponía y en 2001 ganaba el Rip Curl Bells como invitado frente a Danny Wills, uno de los ídolos de su juventud. Mick dedicaría el campeonato a su hermano Sean; habían soñado en hacer el Tour juntos.
En 2002 entraba al Tour y conseguía su segunda victoria en la prueba de J-Bay. Terminaba quinto en su primer año y era elegido «Rookie of the year».
A partir de ese momento la carrera de Mick fuer imparable hasta que en 2004 una grave lesión condicionaría su carrera para siempre. Tras una dura recuperación, volvió al Tour con una actitud completamente diferente y enfocado a conseguir cosas mucho más grandes. Uno de sus grandes apoyos sería el popular entrenador Matt Griggs, que no sólo le ayudó a nivel físico, sino también a nivel mental. Decía así adios a su el «alter ego» Eugene, que era ni más ni menos su lado más salvaje y fiestero. Mick cambió la birra por el balón medicinal y francamente, las cosas empezaron a irle mucho mejor a nivel competitivo. Hasta entonces había sido un surfista rápido por naturaleza, pero Griggs le enseñó a aprovechar esa velocidad en su favor.
En 2007 conseguía su primer título mundial en la prueba de Brasil, al que seguiría otro más en 2009 y el tercero en 2013, ambos conseguidos en Hawaii.
En 2014 terminaba segundo tras su compañero de equipo, Gabriel Medina, y 2015 sin duda fue un clave en la vida del australiano. Sus relaciones personales, el famoso encuentro con un tiburón durante la prueba de J-Bay, y la muerte de su hermano Peter minutos antes de entrar en la manga de Hawaii donde su jugaba el título, fueron sin duda hechos que marcarían su vida para siempre.
Tanto es así que en 2016 decidía tomarse un respiro de la competición y dedicarse el año a surfear por libre. A pesar de su año sabático hizo algunas pruebas como la de J-bay, donde se quitaba la espina del tiburón y ganaba la que a la postre ha sido su última victoria en el Tour.
Hoy 28 de febrero de 2018 Mick Fanning anuncia su retirada de la que ha sido una de las grandes carreras de la historia del surf.
Será en Bells Beach, donde su carrera emergió para siempre.
